El gobernador del Estado, Francisco Vega de Lamadrid firmó una iniciativa para abrogar la Ley del Agua, con lo que queda sin efecto todo lo consecuente, además aclaró que en ningún momento se pretendió privatizar el vital líquido pues iría contrario a la Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos.

La Ley del Agua constaba de la creación de dos organismos estatales para impulsar prácticas responsables y eficientes en el uso y administración del líquido en Baja California, el cual es cada vez más es caso.

Tras las manifestaciones del fin de semana de más de 60 mil bajacalifornianos, el gobernador ha decidido dar marcha atrás a la medida, haciendo énfasis en su lema de campaña, "Conmigo, la gente manda".

Sobre el tema de los costos del agua en la entidad, señaló que son "múltiples factores que han afectado, como son la devaluación de nuestra moneda, el incremento del IVA, las constantes alzas en los precios de las adquisiciones" y además de "los frecuentes aumentos en el precio de combustibles", sin embargo el costo del vital líquido "nunca se vio afectado".